La contaminación acústica puede afectar al desarrollo cognitivo de los más pequeños
Los niños siempre son más propensos a hacer ruido, gritar, llorar, cantar fuerte… Pero sabías que, ¿el ruido puede disminuir su desarrollo cognitivo y por tanto crear algún que otro problema? La Organización Mundial de la Salud reconoce que los niños son más vulnerables al ruido puesto que su organismo y estructura psicológica se encuentran aún en un periodo de formación.
Digamos que como sus cuerpos, cerebros, emociones y sistemas inmunológicos no están aún maduros sufren más, y más teniendo en cuenta la era tecnológica en la que vivimos. Es por ello que la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL – CCC) pide a las autoridades a adoptar medidas más rotundas e insta a cumplir las que ya existen. Así, dicen, podrán hacer frente a la contaminación acústica.
Uno de las principales fuentes de la contaminación acústica es el tráfico, responsable de un 85% de las emisiones acústicas que rondan los 85 dB. La Comisión Europea aclaró que más del 30% de la población española se expone a niveles de ruido de tráfico mayores a los 65 dB recomendados para que no sea perjudicial para la salud.
Que los niños sean más propensos a sufrir la contaminación acústica, o que pueda afectarles más no quiere decir que al resto de edades no le afecte. La presidenta de la Comisión de Audiología de la SEORL comenta que “los niños son, sin duda, los más vulnerables a la contaminación acústica, puesto que tienen un oído más sensible”, y añade que “están sometidos a ruido en las ciudades, en sus casas e, incluso, en la escuela.”.
Para que el ruido no afecte a los más pequeños es labor de todos disminuir esta contaminación y tratar de respetarnos en todos los sentidos.